Mientras me comia la torta de barbacoa, vi que la niña tiraba el refresco.
Las burlas vinieron inmediatamente.
Su madre y su tia o sus amiguitas de la escuela muy desarrolladas le dijeron: tenia que ser el chavo del ocho...
no entendí totalmente su comentario, pero me acordé de mi madre.
cuando hacia algo muy torpe, mi madre siempre tenia un comentario para mi.
mi madre es genial por eso. recuerdo que podia hacer de algo tan trivial como tirar un refresco, una verdadera desgracia.
yo me sentia como un torpe por tirar un refresco, un vaso o algo asi.
vivia con ansiedad. con estres.
cuidaba mis movimientos como si estuviera haciendo una especie de arte marcial.
lo cual me ponia nervioso y hacia que tirara las cosas aun con mayor facilidad.
de nuevo, regaños, comentarios ingeniosos, autoestimas destrozadas.
yo quiero ser tan buen padre como lo fue mi madre.
al menos se leer y escribir (escribir y redactar bien son cosas distintas asi que no nos pongamos locos)
se conpran colchones.
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